sábado, 16 de julio de 2011

ENTENDIENDO EL COLESTEROL.

El colesterol fue hallado inicialmente en los cálculos de la vesícula biliar y de allí recibe su nombre: chole (vesícula), éster (sólido) y el sufijo ol (alcohol). Este hallazgo ocurrió hace 250 años y ha sido una sustancia que ha dado mucho de que hablar pues actualmente se considera que su elevación incrementa el riesgo de enfermedad cardiovascular. Se han otorgado dos premios Nobel a grupos que investigaron sobre su regulación y señalización.

Es una grasa fundamental para la vida, siendo parte estructural del cerebro y el hígado. Además es componente primordial de todas las membranas celulares, proporciona la matriz para construir hormonas sexuales y cortisol, es necesario para la producción de vitamina D y las sales biliares.

Normalmente obtenemos de la alimentación apenas un tercio del colesterol que llevamos en la sangre, el resto es producido por el hígado. Existe un mecanismo de compensación que funciona así: si la persona consume poco colesterol el hígado se encarga de producir el faltante; pero si la persona ingiere mucha cantidad el hígado reduce su producción. Actualmente parecen ser más importantes las grasas saturadas e hidrogenadas como causa de colesterol elevado que el mismo colesterol contenido en los alimentos.

Como el colesterol no es soluble en agua necesita unas proteínas sanguíneas para su transporte y estas son en gran medida responsables de su efecto bueno o malo: las lipoproteinas,  de las cuales se han identificado varias siendo las mas importantes:
lipoproteinas de alta densidad (HDL) que por su tamaño impiden que el colesterol se filtre en las arterias  por lo que se les ha denominado "colesterol bueno", se cree que arrastra colesterol hacia el higado para su purificación
lipoproteinas de baja densidad (LDL) o también llamado "colesterol malo" porque cuando está en exceso se oxida y es digerido por los macrofagos (glóbulo blanco que existe en los tejidos) y va formando capas de grasa dentro de las arterias que posteriormente produciran infartos cardiacos y cerebrales. (Ver video adjunto).

El balance entre los tipos de colesterol está genéticamente determinado pero se puede modificar con estilo de vida, alimentación y medicamentos.

El colesterol es reciclado a traves de la bilis y cerca de la mitad es nuevamente reabsorbido en el intestino. Por eso una dieta alta en fibra lo atrapa y contribuye a disminuir sus niveles en sangre.

Desde hace 30 años se identificaron unos compuestos derivados de un hongo que permitían bloquear el productor de colesterol en el hígado: son las estatinas que permiten descender el colesterol a niveles inimaginables. Se han convertido en piedra angular del tratamiento cardiológico moderno, pues permiten disminuir el colesterol LDL de una manera sorprendente. Se ha determinado que el nivel de este colesterol en un niño recién nacido o en un cazador africano está alrededor de 40 mgrs/dl.  Actualmente se recomienda tener el colesterol de baja densidad por debajo de 100 mg/dl y si la persona ya ha tenido eventos cardiovasculares como infarto, angina, cirugía o angioplastia debe estar por debajo de 70 mg/dl. Cada día se establece más la seguridad de estos compuestos y se fortalece la teoría de "cuanto mas bajo el colesterol LDL mejor para el paciente".

Otra area de intensa investigación ha tratado de  demostrar si subir el colesterol HDL es posible y además bueno para la salud. Idealmente el colesterol HDL debe ser mayor de 40 mg/dl.  Un estudio inicial publicado hace 4 años con una molécula denominada torcetrapib logró incrementar al doble los niveles de HDL, pero los pacientes fallecían más. Recientemente se valoró una vitamina (Niacina) usada desde hace muchísimos años para tratar el colesterol y los triglicéridos, pero el estudio llamado AIM-HIGH fue suspendido por falta de beneficio claro (futilidad). Se esperan nuevos estudios para aclarar esta situación pero de momento solo podríamos concluir que este tipo de colesterol protege solamente cuando es producido espontáneamente por el cuerpo.

Hasta el momento las valoraciones de colesterol solo han tenido en cuenta su cantidad (valores en sangre), pero se está hablando cada vez más de medir su calidad y es posible que a futuro lo importante sea medir el colesterol LDL oxidado : verdadero responsable de los infartos. Mientras esto ocurre adoptar un estilo de alimentación como la mediterránea, logra niveles de anti-inflamación fantásticos, así el valor de colesterol en sangre no disminuya.



Mauricio Pineda Gómez
cardiologo